Confíale a Dios todo lo que guardas dentro de tu corazón,
El siempre está dispuesto a escucharte y aconsejarte
mejor que nadie.
Cuando te sientas la necesidad de contarle a alguien tus problemas puedes contarle a tu mejor amiga pero no dirás todos los detalles siempre hay cosas que nos guardamos y no lo decimos por más que exista confianza con una persona, como es el caso de las mamás cuando existe una buena comunicación puedes platicar con ella sobre todo lo que te inquieta, pero cuando no sientes la confianza de platicar tus problemas..
Sólo Dios puede escucharte pero tienes que hablar con Dios El siempre está dispuesto a escucharte.
Dedica un tiempo para Dios
y en ese momento dices todo lo que te agobia...
y en ese momento dices todo lo que te agobia...
Y si lo dices de corazón
Dios sanará todo eso que te atormenta y poco a poco verás las cosas con más claridad...
Pídele a Dios para ser fuerte mientras pase la tormenta y a tomar las mejores decisiones...
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