Mi único deseo
es ver a mis hijos
sanos y felices.
Le pido a Dios que me los cuide y los protega de todo mal.
Cuando los hijos están chiquitos estamos ahí como madres cuidándolos con mucho amor, pero conforme pasa el tiempo los niños van creciendo, se van independizando de los padres y es cuando ya no podemos estar todo el tiempo detrás de ellos como cuando eran chiquitos.
En esos momentos solo nos queda pedirle a Dios que los cuide donde quiera que anden para que salgan y regresen bien a casa.
Si te gusta esta página comparte en tus redes sociales para que más personas lo vean.
No comments:
Post a Comment
Deja tu mensaje queremos leerte